Quisás mi Corazón,
se encuentra preso
atado por los hilos del pasado,
bien sabe el corazón
cuanto e llorado,
bien sabe el corazón
Cuanto yo rezo.
Rezo y le ruego a Dios
todos los días,
por mis hijos,
que son toda mi riqueza,
por mis nietos,
esas vidas que ahora empiezan,
por mis nueras,
cuidadoras de su cría.
Espero en Dios,
pues quien en Dios confía,
por Dios será escuchado
con certeza,
solamente él substituye
la tristreza,
por grandes y mejores alegrias,
y te pido Señor,
que en esta vía,
por la que transitamos
los humanos,
nos cubras con tu luz
y con tus manos,
se nuestro Salvador!
y nuestra guía.
Autora : Miguelina Martinez
No hay comentarios:
Publicar un comentario